Me siento como nunca me sentí Sé todo lo que gané, pero también recuerdo to lo que perdí Puedes mirar hacia un lado, puedes mirar hacia ti Pero eso no cambiará jamás que lo hicieras así
¿Cuántas veces? Cuántas veces te dejes caer Por el miedo del abismo y del placer Por no saber gestionar, llorar y recaer Por encontrar un motivo que rechazara el ayer
Y ahora que veo en mis ojos Lo que nunca me enseñó un espejo, ahora que casi ya ni me quejo Nos sentimos flojos, porque nos agarramos al miedo Cenizas muriendo en un cenicero
Claro que te quiero, aunque sé que a veces no lo muestro Me flipa el mote que me has puesto Porque solo tú y yo lo sabemos Y aunque se lo explique a los demás nadie más va a entender lo nuestro
Y creo que olvidamos lo que somos, lo que tenemos La vida dando giros con veneno Yo mirando qué trajo de nuevo Una decepción, otro recuerdo para este infierno
Y bueno al final somos lo que seremos Yo parte de mí y de mi silencio Tu parte de esa burbuja tu único universo Esa que frecuentas cuando la realidad no tiene contexto
Y veo un mundo que destruye, que ya no ama Un teléfono que ve que no le llamas Una madre que te espera en casa Otra con tres niños en la calle llora porque la desahucian
Yo que odio el desorden, busco la calma Tú que me miras con esas ganas Yo que loqueo cada día por la mañana Me pongo a escribir para ver si escribir me calma
¡Pero nada me calma! Observo y envidio aquel que disfruta Pero sé que él tampoco tiene culpa El pobre será pobre por mucho que lo discuta El dinero es para ricos por eso ganarlo ensucia
No mola la fama, es un ego falso que te apaga Que te quita lo que más amabas Por mucho que puedas fardar de dinero y casa Sé que cuando te vas a dormir hay algo que si echas en falta
Y es un sueño, volar sin miedo Aunque esta vida me da de todo menos todo lo que quiero Y en verdad ¿Sé lo que quiero? Otra duda que quedará en el tintero
De lo malo sale lo más bueno De la caída renace un vuelo Y de cada herida purifica una lágrima que se esconde En los rincones más pequeños de tu cielo
Y ahora que me muero por estar bien Y sigo luchando cuando me aprieta la sien Siento no poder estar en el vagón del tren Que para en las estaciones de aquellos que jamás ven
Porque cuando estamos ciegos, no somos nosotros es el miedo Es la parte que no conocemos Es la muerte dentro de la vida que llevamos Por eso anhelamos, pero eso casi nunca lo vemos