Me siento soñador, tengo la idea revuelta de proyectos que me espantan. Mi casa es casi el cielo, una azotea, y vivo como quiero, a la marchanta...
Mi vida se ha incendiado de bohemia con un color rayano en inquietud, mis versos son el pan, el pan que premia tanta desolación y juventud.
Bohemio, siento el placer más perverso en comentar con mi verso lo que calló a la amistad. Bohemio, nadie me ata y me mantengo con la renta que no tengo y que no tendré jamás. Mi vida nunca usó del acomodo y si siempre empinó el codo lo hago siempre... pa' variar... pues creo que es peor, pero más bello, que ponerle a todo el sello: moneda curso legal...
Yo sé del vil ensueño y la quimera porque a cada momento los encuentro. Lo malo es que me gozo por adentro con cosas que practico por afuera.
Salí con la linterna y la apagaron, la apagó la mujer de mi ansiedad, y dicen que ando a oscuras, mas la erraron, yo sé que me ilumina la verdad.