Hay frío no hay llama ay gánate, de la cara a la mente; hay frío no hay llama ay gánate, de la cara a la mente. Hay un invierno crudo, que viene de a poco, calando los huesos, y eso no es un juego para los viejos, que en la calle por ahí te andan pidiendo… Un poquito pa’ comer puchito un peso para el hospedaje, antes de que se vayan de viaje, en la acera te lo puedes encontrar. Vamo’ a hacer que palma amenice la espera, canturreamo’ guaracheamo’ hasta que llegue primavera.
Aquí hay agüita hirviendo, el mate va corriendo, y de a poquito la familia viene saliendo, esta fiesta se está encendiendo. Unos sacan una petaquita otros pegan una quemadita, si es buena la cosecha, aquí se quita, quitará todas las penas Vamo’ a hacer que palma amenice la espera, canturreamo’ guaracheamo’ hasta que llegue primavera.
Y que te prendo fuego y que te quemo luego, y de a poco descongelo esas caderas negra bella. Hay frío no hay llama ay gánate, de la cara a la mente; hay frío no hay llama ay gánate, de la cara a la mente; hay frío no hay llama ay gánate, de la cara a la mente; hay frío no hay llama ay gánate… Si el invierno te quitó las ganas, préndelo, quémalo; si en la mañana no te puedes levantar jamás, quítate la telaraña. Si el invierno te quitó las ganas, préndelo, quémalo; si en la mañana no te puedes levantar jamás, quítate la telaraña.
Cuidao’ que mi llama quema, arrímese pa’ acá y la descongela, arrímese pa’ acá y la descongela, cuidao’ que mi llama quema, cuidao’ que mi llama quema, arrímese pa’ acá y la descongela, arrímese pa’ acá y la descongela, cuidao’ que mi llama quema… Suavecito en la mañana, te va agarrar un día cualquiera morena…
Quítate la telaraña para que prenda luego el fuego de la chinganera, quítese esa mala maña, no va llegar a nada perdida en la friolera. Quítate la telaraña para que prenda luego el fuego de la chinganera, sola triste y desarmada, así te vas a quedar. Quítate la telaraña, quítate la telaraña, quítate la telaraña, quítate la telaraña.