Siempre una despedida es triste y sola, siempre el decir adiós es el morir, me arranca el corazón y sigo vivo igual mejor morir. Y muero por morir y muero por vivir me has besado igual y tengo que pedir Abrázame una noche más que un amor imposible lo merece igual quémate entre mis manos húndete entre mis brazos atrévete a dejar salir un deseo que se muere por vivir. Siempre el destino trae una salida siempre una puerta se abre por detrás las lágrimas no evitan la partida igual te atrae huir. Y mueres por morir y como estar sin tí te he besado igual y tengo que pedir... TRAS ESA PUERTA Hace ya tanto tiempo que camino este camino sin pensar hace tanto y es tan poco el que no estás confundo timidez con ganas de no molestar ni por favor y esquimo en cada vuelta un espejismo de tu amor. Hace tanto, tanto tiempo que no hay nadie en estos rumbos no sé si abandoné la compañia en este mundo no sé si he avansado o sólo en círculos he andado no sé si ese cuerpo que cayó fuí yo al morir. Quién es quien va a cambiar la historia de esta quietud violenta que me nombra y no dá más qué es lo que hay tras sus viejas glorias que sólo es tiempo y refugio en la sombra y no da más. Mis mejores recuerdos daría por llegar en tí y en tí dormir. Tras esos ojos de alcohol tras esos muros de piel tras esa puerta de miedo he visto calmar un loco corazón. Al confundirse la emoción y los deseos se han borrado en algo triste y no muy nuevo por jugar mientras su falta hizo sangrar mi corazón, ya mi alma se ha derretido en su calor.