Este sitio pequeño donde habito tiene un abismo de mar al que me arrimo es el lugar en el cual dejo mi cuerpo y salgo a navegar con mis sentido
Este sitio pequeño donde habito pequeño y singular lo siento mío, arena, piedra y mar, faro encendido me indica luz a luz que sigo vivo.
Un pedazo de arena, poca gente no hay nadie que interrumpa mis delirios con ellos paso el tiempo y lo desangro con el cuchillo del silencio antiguo.
Es muy fácil vivir en este sitio sólo basta encontrarse a uno mismo renacer con el sol cada mañana y dejarse morir en día Domingo.
Aquel que tenga gaviotas en el alma puede venir al sitio que yo habito golpear en las puertas de mi alma con un poema en un papel escrito.
Yo le daré las llaves del silencio para que aprenda el silencio compartido y pueda renacer cada mañana y dejarse morir en día Domingo.
Este sitio pequeño donde habito pequeño y singular lo siento mío, arena, piedra y mar, faro encendido, me indica luz a luz que sigo vivo: y que puedo renacer cada mañana y dejarme morir el día Domingo