Al final, amigo corazón, quedamos solos. Si se fue, nos queda recordar lo que pasó. Al final, amigo corazón, ya no la lloro. Si también, mi lágrima final se la llevó.
Y recuerdo que, aprendí a quererla y a decirle mía y a llenar sus noches y a vivir sus días, y a leerle versos de poetas nuevos, y explicarle cosas simples del amor.
Le conté que el mundo con los dos moría, porque todo el mundo era de los dos, pero como se ha marchado nunca lo creyó.
Corazón que late, corazón que llora, corazón que sufre, corazón que implora, corazón que sabe que al llegar la aurora, morirá la noche, morirá con él.
Corazón cansado, corazón herido, que por más que busque no tendrá su nido. Corazón que gime porque se ha perdido lejos de su lado, lejos de su piel.
Y aprendí a quererla y a decirle mía y a llenar sus noches y a vivir sus días, y a leerle versos de poetas nuevos, y explicarle cosas simples del amor.
Le conté que el mundo con los dos moría, porque todo el mundo era de los dos, pero como se ha marchado nunca lo creyó.
Corazón que late, corazón que llora, corazón que sufre, corazón que implora, corazón que sabe que al llegar la aurora, morirá la noche, morirá con él.
Corazón cansado, corazón herido, que por más que busque no tendrá su nido. Corazón que gime porque se ha perdido lejos de su lado, lejos de su piel.
Y al final, amigo corazón, para que sirve recordar si no puedo lograr que vuelva a mi. Y al final, amigo corazón, quedamos solos. Es mejor, mejor para los dos, morir, morir así. Simplemente morir así.