No cuento más que fronteras hacia cualquier dirección. Mi estrella fue de tercera, no mi sol.
Mi cuerpo choca con leyes para cambiar de lugar. Mi sueño, rey entre reyes, echa a andar.
Cuento larga lista de todavías, Marginado de un mundo que hago y no vivo. Cada confín es un agravio a mi sudor, mi verso, mi sangre.
Fronteras de tierra, fronteras de mares, fronteras de arena, fronteras de aire. Fronteras de sexo, fronteras raciales, fronteras de sueños y de realidades.
Fronteras notorias, fronteras quemantes, fronteras famosas, fronteras de hambre. Fronteras de oprobio, fronteras legales, fronteras de odio, fronteras infames.
Mi país es pobre, mi piel mejunje, mi gobierno proscrito, mis huestes utópicas. Soy candidato al inventario de la omisión, por no ser globable.
Fronteras que rigen Los sumos lugares, fronteras tangibles y siempre intocables. Lo mismo perpetuas que provisionales, me envuelven fronteras por todas mis partes.