Del barrio La Mondiola sos el más rana y te llaman Garufa por lo bacán; tenés más pretensiones que bataclana que hubiera hecho suceso con un gotán. Durante la semana, meta laburo, y el sábado a la noche sos un doctor: te encajás las polainas y el cuello duro y te venís p'al centro de rompedor.
Garufa, ¡pucha que sos divertido! Garufa, ya sos un caso perdido; tu vieja dice que sos un bandido porque supo que te vieron la otra noche en el Parque Japonés.
Caés a la milonga en cuanto empieza y sos para las minas el vareador; sos capaz de bailarte la Marsellesa, la Marcha a Garibaldi y El Trovador. Con un café con leche y una ensaimada rematás esa noche de bacanal y al volver a tu casa, de madrugada, decís: "Yo soy un rana fenomenal".